Y tú, ¿lo recuerdas?

Todavía me acuerdo de cuando te vi por primera vez. Llevabas esa camiseta, sí. Esa que tanto me gustaba y que siempre que la llevabas puesta me recordabas, que la primera vez que me viste, la llevabas puesta. Me ofreciste un cigarro y desde ese momento, supe que pasaría algo, que todo no se iba a quedar en un par de caladas. 
No tenía ni idea de lo que era enamorarse de verdad. Me enseñaste a querer y has cambiado, ¿sabes? Me has cambiado a mi, me has enseñado que lo que un día te hace daño, al otro te hace mas fuerte. Y por eso estoy aquí, escribiendo esto, aunque tú nunca lo leerás. 
Soy una niñata. Pero soy igual de niñata que la chica con la que estas ahora. Seguro que ella te quiere.. ¿Y tú? ¿La quieres? ¿A ella también la llamas todas las noches diciéndola que la echas de menos, que es preciosa, que tiene una sonrisa encantadora? Si es así, entonces estoy segura de que tu nunca me has querido.
No es mi culpa que estemos así. Estamos así porque eres un estúpido egocéntrico que solo piensa en él. Que le importa una mierda como estén los demás, que si lo pasan mal, pues que lo pasen. ¿A ti que mas te da, verdad?
No se, la última vez que hablamos parecías haber cambiado. Espero que sea así, porque con 18 años, ya es hora de madurar ¿no? 
No voy a decirte que espero que todo te vaya bien, porque no es así.. Para que vamos a engañarnos. 


¿Sabes una cosa?
Ahora le tengo a él, será mas niñato que tú seguramente. Pero él me quiere, lo sé. Y lo mejor de todo, lo que más me importa, es que ÉL, me saca una sonrisa, donde tu solo ponías lágrimas.